Un sistema fluvial con deltas y lagos cubrió hace millones de años el cráter Gale según sugieren las imágenes de rocas y sedimentos captadas por el rover Curiosity, que recorre ahora esta región marciana por donde una vez discurrió el agua. Los nuevos datos proporcionan una visión sin precedentes en los patrones del agua, el clima y la habitabilidad del planeta rojo. El área que ha recorrido Curiosity pudo necesitar cientos de millones de años en acumular sus depósitos. En español:
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