a hora de la tarde, cuando apenas son más de las dos, Isabel Reyes y su amiga Mercedes Sierra caminan con paso cansado frente a los comercios de la Avenida Uxmal, cerca del centro de Cancún, cada una con par de bultos en las manos. A su alrededor, interponiéndose en su camino, el enjambre propio de la ciudad, un reguero indetenible de estudiantes sumergidos en WhatsApp, mujeres con bolsas de compras, vendedores ambulantes, mendigos que tocan la flauta y gente que espera el bus bajo el ruido de los zanates.
|
etiquetas: cubanos , cancún , mercado encubierto , cuba , mulas