Son días de cierta espiritualidad. Días de liturgia y de cirios como tu cabeza. También son días de lluvia. Es lo que tienen las borrascas, que no hay dios –ni virgen– que las detenga. Tal es así que este año hasta el Cautivo de Santa Genoveva se ha encomendado a un providencial chubasquero azul para acometer lo que viene siendo su paseico anual por las calles de Sevilla. La cosa tiene bastante guasa y las redes, tan fervorosas como socarronas, han tenido a bien hacerse eco de este asunto.
|
etiquetas: cachondeo , impermeable , cristo , semana santa , sevilla , chubasquero