Los vecinos denunciaron públicamente que la casa se había convertido en un narcopiso, con un constante trasiego de personas y presencia de camellos de la zona. También el consumo de droga en las áreas comunes. Incluso pusieron un vigilante privado en la comunidad y demandaron a la Xunta que tomase medidas.
|
etiquetas: narcopiso , cadáver , programa aluga