Me lo encontré paseando por internet, porque la curiosidad como se vio no mató al gato, sino que lo hizo más conocedor de esas herramientas domésticas que usamos como martillo, o martirio debiera apuntar, no es una acusación contra cenicienta, por llevar tacones, quizás eran taco cuatro, quién sabe, disfrutad de este trozo de historia.