El arte japonés del papel recortado, el kirigami, aplicado a una panel de solar plano pero flexible, consigue que éste pueda doblarse de forma ‘programada’ y seguir el movimiento (aparente) del sol en el cielo, aumentando la eficiencia en la producción de electricidad de entre un 20 y un 40 por ciento con respecto a un panel solar fijo convencional. Los paneles solares fijos, aún orientados de la mejor manera, captan y convierten en electricidad sólo una pequeña parte de la energía solar. Los paneles solares motorizados...