Apple no compite en el segmento de los smartwaches. Cualquiera que intente compararlo con otra marca rival de electrónica de consumo se equivoca de pleno. La empresa de Cupertino no quiere competir con esos dispositivos. A donde ha apuntado Tim Cook es a Suiza, en concreto, a Tag Heuer, a Rolex, a Tissot, a Brietling, etc. Este AppleWatch no es un wearable, no es un smartwatch; es un reloj. Y no quiere jugar en la liga de los relojes de plástico, quiere jugar con los chicos grandes, los que valen dinero.