Las amenazas persistentes avanzadas (APT) y los ataques dirigidos han demostrado su capacidad para penetrar en las defensas de seguridad estándares y permanecer ocultos durante meses mientras sustraen datos valiosos o llevan a cabo acciones destructivas. Y es que muchas empresas son objetivo principal de este tipo de amenazas: instituciones financieras, organizaciones sanitarias y grandes minoristas, entre otros.
|
etiquetas: ciberataque , seguridad , privacidad , datos