La bola de cristal fue un espacio revolucionario en todos los sentidos, una fantasía cultural que marcó a toda una generación, con sus proclamas antisistema y su humor gamberro, sus videoclips y sus críticas a cualquier tipo de autoridad, ya fuese política o mediática.
|
etiquetas: television , movida , bola de cristal , alaska , bruja averia
Solo se salvaban de Cajón Desastre los sketchs de Faemino y Cansado y quizá la seriecilla que hacían que salía Ángel de Andrés López (ya, según gustos). Bueno, y las series infantiles y juveniles que contenía , ya que era un programa contenedor, como también lo era La bola de cristal.
Así que como dice #3 , tiene que ser más que eso. Por ejemplo tratar a los niños como pequeñas personas y no como grandes retrasados, como hacen gran parte de los programas infantiles.
Que manía con explicar todo a base de nostalgia. Ojo, que en muchos casos sí, las miras y flipas las cosas que nos marcaron de críos cuando las vuelves a ver. Pero otras eran realmente buenas (para niños se entiende, igual de adultos te aburren). Saludos.
En este caso es algo más que nostalgia, porque cuando veo algún sketch de la Bola de cristal no pienso vaya mierda como me podía tragar eso.
Formal.Le he dado otra oprtunidad ahora con las reposiciones. No voy a decir qure ahora me apasione, pero es alucinante la cantidad de colaboradores que tenían, sobretodo los invitados musicales: Santiago Auserón, Loquillo...
Los electroduendes me parecían unos insoportables petardos gilipollas (sólo se salvaba la bruja Avería por las burradas que soltaba), un poco menos petardos que mis primos.
* La sección de música, bueh,....
No se cortaban un pelo en dar palos a quien hiciese falta, sin caer en lo chabacano, el frentismo y el pum, pum.
Impensable en esta época de neomonjes y neomonjas de un lado y otro
que se les levanta la piel a la mínima, que solo admiten guisos con sal gruesa
y siempre que sean para el otro.