"No fue la música de cámara, si no incluimos en ella la música para piano solo, un ámbito de creación favorito de Prokofiev. Pero con que sólo hubiera compuesto las tres obras aquí incluidas, ya sería más que suficiente [...] [Sus dos cuartetos] están escritos con la lógica nerviosa del autor para el teatro, pero no se trata de obras dramatizantes; al contrario, tienen su propia lógica abstracta, irreductible. Son dos obras sin concesiones, de extraña sequedad a veces, con formas clásicas y aliento moderno" (Scherzo nº 95, junio 1995)
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etiquetas: música clásica , fonografía , composiciones de 1930 , grabaciones de 1994