Conmoción en un inmueble de Eras de Renueva, un barrio residencial de León, tras aparecer pintadas en las que se denuncia el ejercicio de una actividad de masajes «con final feliz. Un desconocido («Una mujer despechada», según algunos vecinos) había cargado de mensajes los telefonillos del inmueble y los cristales de acceso al hall central de todo el edificio. Los expertos en derecho recalcan: la actividad es lícita, mientras no ocasione problemas al vecindario y tribute
|
etiquetas: león , vecinos , vecina , masaje , prostitución , aquí no hay quien viva