El escritor belga Simon Leys dijo que "todo lo que puede pronunciarse está desprovisto de importancia." Y se quedó tan ancho. De un plumazo convirtió la literatura en ruina, pena y escombros. Y aunque no carecía de razón prefiero acordarme de Pessoa cuando escribió: "Todo lo que hago o medito siempre se queda a mitad. Querer, quiero lo infinito. Al hacer, nada es verdad."
|
etiquetas: ficcion , literatura , libertad de expresion , escritores , vicios