La antigua ciudad griega de Cirene (en la actual Libia), donde nació Eratóstenes, fue fundada por colonos de Tera (Santorini) siguiendo el consejo del Oráculo de Delfos hacia el año 632 a.C. Pronto prosperó y llegó a convertirse en una de las ciudades más ricas del Mediterráneo. En ello tuvo mucho que ver una planta, cuyo comercio Cirene dominó durante siglos. Era su principal producto, de tal importancia en la economía de la ciudad que incluso las monedas llevaban su imagen. La llamaban Silfio (Σίλφιον).
|
etiquetas: misterio , desaparición , valiosa , planta , medicinal , antigüedad