Dorothea Binz murió en la horca en 1947 condenada por sus aberrantes crímenes. Se le atribuyen las muertes de más de 100.000 prisioneros entre mujeres y niños. Es una historia tan antigua como dolorosa, pero vuelve a la luz gracias a un documentado reportage de investigación recien publicado por la periodista Sara Helm en The Daily Mail:
www.dailymail.co.uk/news/article-2905820/Giggling-genocide-flirted-SS-