Su figura ha sido revisada por la historiografía contemporánea, para colocarlo como un servidor de sus propios intereses, sin desmerecer su virtud como excelente soldado medieval, puso su espada al servicio del mejor postor, fuese cual fuese su profeta preferido. Para muestra un botón; su puesta de largo como soldado medieval la realizó al servicio de un rey cristiano, luchando codo con codo con los musulmanes, mientras enfrente tenían otro rey cristiano.
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