En este número de Homo Velamine presentamos un compendio de afirmaciones categóricas que penden sobre el vacío existente entre la realidad y la construcción ficticia. Por un lado, collages que eliminan de sí todo lo feo de la tribu propia a los que hemos llamado “Frankitschmos”; por otro comentarios que ponen todo lo feo en la tribu ajena, a los que hemos llamado “Gente entrañable”.