El hombre, que se encontraba en pésimas condiciones de salubridad, logró pedir auxilio a través de la ventana a unos vecinos, quienes pudieron alertar a la Policía Nacional. Sus dos hijos y la pareja de uno de estos fueron arrestados como presuntos responsables de un delito de detención ilegal. Cuando los policías llegaron al domicilio, los hijos de la víctima reconocieron que tenían retenido a su padre en una habitación, encadenado a la pared, alegando que sufría trastornos mentales. La habitación estaba en condiciones insalubres.