Un estudio publicado en "National Center for Biotechnology Information" ha encontrado que los microplásticos que se emplean en las mascarillas contra la COVID-19 contienen cierta cantidad dde químicos tóxicos, entre ellos los pene-reductores falatos. Los falatos se han relacionado con efectos tales como la reducción del tamaño genital, decremento en la fertilidad y reducción de comportamiento masculino en niños.