El año pasado, Alemania, la cuarta mayor economía del mundo, alcanzó un hito mediante la reducción de su consumo total de energía sin dejar de registrar un crecimiento económico de 1.5%, rompiendo un modelo tradicional en el que las naciones consideran que el uso de la energía caen sólo durante las recesiones. El % de uso de energías renovables ha continuado aumentando a medida que el uso de combustibles fósiles ha caído - al mismo tiempo que calmaba las preocupaciones de la industria sobre el aumento de los costos.