Probablemente hoy no sea la fecha más oportuna para reabrir un debate como éste o, precisamente por ser el día que es, quizá si. Porque mientras pronunciamos discursos, pegamos carteles, soltamos globos, divulgamos vídeos, ponemos camisetas, hacemos cadenas humanas y subimos a las redes miles y miles de mensajes contundentes y fotos, la vida cotidiana deja a nuestro lado infinidad de situaciones que pasan desapercibidas y que no reciben ni tanta atención ni los mismos recursos. ¿Estamos haciendo las cosas bien?