La exdiputada de la CUP Anna Gabriel, actualmente exiliada en Ginebra (Suiza), ha asegurado que "mientras haya represión, el exilio será útil", y ha defendido su marcha a la ciudad suiza, donde vive desde febrero del 2018, porque se trata "de una ciudad internacional y una ciudad refugio", donde ha podido dar a conocer la causa catalana: "aquí podemos abrirnos al mundo y contactar con todo el mundo".