Frente a la controversia de si los indios americanos tenían alma o no, lo que permitió a los conquistadores explotarlos hasta su desintegración, cargándose, número más número menos, entre 30 y 60 millones, por lo que en 1537 el Papa Pablo III, emitió su bula Sublimis Deus en que palabras más palabras menos decía: “Nos, que aunque indignos, ejercemos en la tierra el poder de Nuestro Señor… consideramos sin embargo que los indios son verdaderos hombres y que no solo son capaces de entender la fe católica, sino que, ...