Un perro grande y ladrador puede ser intimidatorio la mayoría de las veces. Tal vez más si está al lado del presidente ruso, Vladimir Putin. Dos periodistas japoneses reaccionaron con incomodidad el miércoles cuando Putin llevó, antes de una entrevista, a su perra Yume. Con las cámaras presidenciales encendidas, la Akita de 4 años comenzó a ladrarles fuertemente a los periodistas, quienes se quedaron congelados, sonriéndole incómodamente a la bulliciosa canina.