La banca española, con los directivos mejor pagados de Europa, cerró el año 2022 con unas ganancias récord de más de 20.000 millones y un crecimiento medio de sus beneficios por encima del 25%. El año 2023 va aún mejor. El BBVA declara haber ganado en el primer trimestre 1846 millones, con una mejora en sus beneficios por encima del 40%, que habría podido superar —lamenta— si no fuera por el impuesto extraordinario a la banca —225 millones de euros—.