El informe del forense sobre la muerte de Lucía Vivar ha sacudido los cimientos de la investigación del suceso. La niña de tres años desapareció y murió la semana pasada en torno a las vías del tren que une las localidades malacitanas de Pizarra y Álora. Jugaba con unos primos, se desorientó y, al cabo de unas horas, se encontró su cadáver junto a la ruta ferroviaria, a unos cuatro kilómetros del punto en el que se le perdió el rastro. Según los primeros indicios, caminó sola y de noche por un camino lleno de obstáculos, cayó desfallecida