En 2001, con la venta del 15% de sus acciones en Inditex ingresa 1.000 millones de euros y es en ese momento en el que también surge la Fundación Amancio Ortega, a la que dotó con 60 millones de euros. La fundación recibe todo tipo de peticiones, ambiciosas, pequeñas, personales e incluso insólitas. Quienes conocen su funcionamiento de cerca no desmienten que Amancio Ortega se haya implicado en algún proyecto, pero si los hay no quieren hablar de ellos porque es el estilo del ‘jefe’. Suelen ser los receptores los que descubren el secreto.