Somos muchos los que pensamos que en momentos como este hacen falta luchadores que luchen por sus sueños, Quijotes que se enfrenten a gigantes económicos y políticos corruptos que han dado la espalda al pueblo del que proviene su poder. Para la supervivencia social necesitamos soñadores que nos recuerden lo que verdaderamente importa, y que las causas perdidas, aunque perdidas, siguen siendo causas. Los gobiernos, las religiones, los sistemas económicos, sólo por nombrar algunos, son gigantes que han crecido demasiado,alimentándose de nosotros.