La investigación, que publica este lunes la revista Nature Materials, abre nuevos caminos para los científicos para ver si este mecanismo de regeneración cardíaca se puede aplicar en terapias para humanos. El director de la investigación, Xavier Trepat, ha explicado que tras una lesión aguda, como un infarto de miocardio, el corazón humano es incapaz de regenerarse porque las células cardíacas adultas no pueden crecer y dividirse para sustituir a las dañadas, y la lesión se vuelve irreversible.