Miremos los datos sólo de los concertados que el INE etiqueta como “religiosos”. En el curso 2020-2021, último cerrado, de los 3.165 centros religiosos de educación no universitaria, el 82,08%, un total de 2.598, eran concertados, lo que expresa un alto grado dependencia de los recursos públicos. Dichos centros recibieron 4.689,59 millones de euros públicos, un 20,08% más que en el anterior curso explorado, 2014-2015.