A través de un ejemplo de la política real española reciente, este post trata sobre la necesidad de distinguir las causas y los efectos del envejecimiento demográfico teniendo en cuenta el volumen de la población analizada. A medida que el crecimiento demográfico explosivo del siglo XX vaya quedando atrás, tendremos que soportar un auténtico tsunami de alarmismos patrióticos obsesionados con la pérdida de volumen poblacional y la catástrofe del envejecimiento demográfico, aunque no se sustenten en ningún conocimiento real sobre demografía.