El rostro de Mediaset se contagió por coronavirus hace dos semanas y, desde entonces, pelea contra la enfermedad. Sin embargo, ahora ya no lo hace desde casa, sino desde la cama del hospital. Y es que el virus, asegura, "no es una broma". Hace unos días, Arrabal lamentaba no haber sido más cuidadoso frente a la expansión del virus. "Llevo trece días con el virus y anoche me tuvieron que ingresar. Lucharé hasta que no me queden fuerzas para curarme. "Me hago una pregunta: ¿por qué no luché igual de fuerte para no contagiarme?", reflexionó.