Mientras los gobiernos de Alemania, Francia e Italia ya han establecido plazos y fechas para comenzar a levantar las medidas de confinamiento, el Gobierno de España sigue sin tener un plan ni un calendario concreto para iniciar la llamada "fase de desescalada". Así se desprende de la comparecencia en la que Pedro Sánchez informó este sábado que pedirá al Congreso una nueva prórroga de quince días para el estado de alarma, hasta el 9 de mayo, y en la que anunció también que dejará salir a los niños a la calle a partir del 27 de abril.