Torra pone el foco en la actuación de los Mossos mientras evita llamar a la calma frente a los desórdenes públicos durante las protestas tras la condena. La misma resolución, la 476/X, que prohíbe el uso de balas de goma desde el 30 de abril de 2014, establece el control y la evaluación de la actuaciones policiales, así como la obligación de que el Parlament condene los alborotos y promueva el aislamiento y el rechazo social de los que provocan los disturbios. Justo lo contrario de lo que hace el Govern con Quim Torra.