Los estudios no demuestran que suponga un ahorro importante. Las ganadoras son las empresas de consumo. No es difícil imaginar que los grandes ganadores del horario de verano son las empresas de consumo minorista: tiendas, cafeterías, bares…, más todavía si se complementa con la llegada del buen tiempo. Sin embargo, que existan ganadores no significa que los cambios horarios sean positivos para el conjunto de la economía. De hecho, el consumo genera crecimiento económico de corto plazo, pero lo que importa aquí es la inversión.