En el caso de que Gran Bretaña habría adoptado el euro como su moneda, se puede decir con certeza que hubiesen sucedido dos cosas: no hubiese habido un referéndum en el Reino Unido sobre la membresía en la UE, y Grecia no hubiese sido el dominó que cayó primero. La pregunta interesante es: ¿cómo se sentirían aquellos que apoyan a Brexit hoy en día si Alemania y Francia habrían tomado medidas para desechar las reglas actuales y abrir el paso a una unión fiscal completamente desarrollada?

Varoufakis presentó hoy en Atenas MeRA25, la sección helena de DiEM25, el movimiento paneuropeo que ya presentó en Nápoles (Italia) a principios de marzo y que pretende "recuperar nuestra Europa" a través de "alternativas realistas". "Somos un partido nuevo, pero no un partido más", explicó el exministro, que definió este proyecto como una "alianza de izquierdistas, ecologistas liberales y de todo el espectro democrático", cuyas listas nacionales serán elegidas por afiliados de toda Europa...

El exministro de Finanzas de Grecia, Yanis Varufakis, presentará este sábado en Nápoles (Italia) el proyecto que liderará de cara a las elecciones europeas que se celebrarán en 2019. La idea de Varufakis era aglutinar en una candidatura "transnacional" a los principales partidos con una visión alternativa de la actual UE. Pero la mayoría se han desmarcado, incluidos Podemos, IU o Barcelona en Comú.

"La crisis se está haciendo más profunda, más tóxica, más permanente". Entrevista con Yanis Varoufakis donde se le pregunta sobre la crisis y la democracia en Europa y en España.

El exministro de Finanzas griego y fundador del Movimiento por la Democracia en Europa 2025 (DiEM25), Yanis Varoufakis, ha dicho este miércoles sentir "vergüenza como europeo" de que parte del exgobierno de la Generalitat esté en prisión, aunque ha sostenido que para convocar un referéndum jurídicamente vinculante deben ganarse las elecciones con mayoría absoluta de votos y haberlo incluido en el programa electoral.

El exministro griego dice tener la solución para la crisis catalana: un marco europeo que ponga reglas claras a los anhelos secesionistas en los estados miembros de la UE

El exministro de Finanzas griego Yanis Varoufakis ha criticado en un tuit el auto de prisión para el vicepresident catalán y sus excompañeros del Govern. Según Varoufakis, una Constitución en la que se encarcela a "políticos que persiguen pacíficamente una agenda política" no puede ser democrática.

...haciendo lo mejor que pueden para fermentar... la independencia catalana!".

Alejado del poder, pero no de los focos, Yanis Varoufakis (Atenas, 1961) sigue manteniendo intacta su capacidad para provocar y para tener un análisis propio alejado a años luz del establishment de la Unión Europea: "si Cataluña logra independizarse encontrarían una solución conveniente para en cinco minutos volver a pedir la entrada y ser readmitidos". La Comisión Europea lleva repitiendo desde 2004 justamente lo contrario.

Dado que yo presenté a Tsipras mis planes para evitar la agresión de la Troika y para responder a un posible callejón sin salida (así como cualquier movimiento de la Troika para echar a Grecia de la eurozona) antes de ganar las elecciones en 2015 y aún así fui nombrado su ministro de Economía gracias a ellos (se supone), la respuesta de Tsipras refleja una gran incoherencia. O fui la elección correcta para iniciar el “choque” con la Troika porque mis planes eran convincentes, o mis planes no eran convincentes y, entonces, fue una mala decisión.

Para decidir sobre una estrategia de negociación de Brexit, puede ser mejor escuchar a los ex ministros de finanzas griegos que confiar en la sabiduría convencional de los diplomáticos experimentados de Bruselas. La segunda lección de esto es que se necesita un plan B. El ex ministro de Hacienda griego, Yanis Varoufakis, tenía planes para introducir un sistema de pagos paralelo que hubiera permitido a Grecia dejar de pagar sus deudas mientras formalmente permaneciera como miembro de la eurozona. Era un plan audaz, y en mi opinión habría…

Desde hace apenas año y medio llamamos a las fuerzas democráticas de Europa a oponerse a esta combinación de autotitarismo e incompetencia que caracterizan al "establishment" europeo y a las fuerzas desmembradoras del nacionalismo. Ambas fuerzas son una gran amenaza para Europa. Solo un movimiento de base, transnacional y paneeuropeista puede cambiar algo.

Hace dos años Yanis Varoufakis condujo los intentos fallidos de Grecia de negociar con la UE. Ahora explica como el establishment de Bruselas hará todo lo posible para frustrar a la primera ministra británica, usando técnicas de manipulación de la verdad o la estrategia de Penélope.

Cuando mi país estaba siendo acosado por el establishment proausteridad europeo, Macron era un raro aliado. Y más importante aún, él es todo lo que se interpone entre Francia y el fascismo de Le Pen.

El exministro griego recuerda que la izquierda francesa votó por Chirac en 2002. Yanis Varoufakis, exministro griego de Finanzas pide a los progresistas franceses votar por Emmanuel Macron el próximo domingo. “Macron fue el único ministro de Europa que hizo lo posible por salvar a Grecia” en el peor momento de la crisis, asegura. “Para mí es un enigma”, añade, que la izquierda francesa votara en 2002 al candidato de la derecha, Jacques Chirac, contra el padre de Marine Le Pen y ahora no lo haga contra ella. ¿Es que es Marine una opción menos

La administración Trump pretende desarrollar una política económica que incluye estímulos fiscales (mayor gasto público y menores impuestos) y restricciones a la movilidad de las personas y las mercancías, manteniendo la plena movilidad del capital. De llevarse a cabo, este plan trastocaría el orden económico internacional, creando uno nuevo. Sería la tercera vez en menos de cien años que EEUU cambia las reglas del juego, siempre con la intención de mantener su hegemonía.

La Unión Europea, liderada por la troika, amenaza con destruir el sueño europeo. ¿Cómo promover un debate constituyente en medio de esta crisis continental? ¿Puede el municipalismo tener un papel clave en esto?¿En qué podrían consistir las monedas locales no sujetas al control del BCE y hasta qué punto podrían ser una medida realista? (INGLES CON SUBTÍTULOS EN ESPAÑOL)

Las instituciones de la UE son antieuropeístas y desprecian la democracia. La gente podría preguntarse: si es así, ¿por qué argumento a favor de la permanencia, pero en contra de la Unión? En respuesta, pregunto a los que apoyan el argumento de izquierdas a favor de Brexit: ¿Desde cuándo ha sido el estado británico un amigo de la clase obrera? Nunca. Y sin embargo, su argumento es: No hay que desmontarlo. El estado nacional fue creado para promover una noción ficticia de un interés nacional de trabajo para apropiarse del trabajo.

Dirigido a compañeros de izquierda críticos con DiEM25 que afirman que DiEM25 persigue el objetivo erróneo (democratizar la Unión Europea) mediante una estrategia incorrecta (centrarse en el nivel europeo en vez del nacional). Esta respuesta, aunque se dirige a los izquierdistas partidarios del “lexit” (la estrategia de convocar referendos a favor de abandonar la UE, al estilo del brexit), es pertinente también para abordar las preguntas planteadas a menudo por parte de otras tradiciones políticas a las que DiEM25 pretende unir en la lucha ...

La izquierda europea, en la época del nacimiento del Minotauro Global (es decir, desde finales de los 70 hasta 2008) fue olvidando cada vez más que cuanto más financiarizado está el capitalismo, cuanto más el trabajo es tratado como cualquier otra mercancía, cuanto más descansan nuestras sociedades en las burbujas inmobiliarias como fuentes de renta y de deuda, tanto más inestable, abocado a las crisis y, finalmente, incivilizado se vuelve el capitalismo.

La política en las economías avanzadas de Occidente está en la tesitura de una reestructuración política como no se ha visto desde los años 30. La Gran Deflación que tiene acogotados a ambos lados del Atlántico está haciendo que revivan fuerzas políticas que habían estado dormidas desde el final de la II Guerra Mundial. Está volviendo la pasión a la política, pero no de la forma que muchos habíamo