Ocho apellidos vascos triunfo mucho en su momento, haciendo una gran taquilla, algo que sinceramente, me sorprendió mucho, ya que no pensaba que fuera una gran película, después, cuando la vi, me di cuenta que realmente era una película cutre, rancia y llena de tópicos, que jamás debió ser rodada y mucho menos, estrenada. Considero que si hubieran quemado los billetes que costo realizar la película, hubiera sido mucho más productivo e interesante para la sociedad y para el cine.