El gobierno PSOE-UP es un disciplinado instrumento del capitalismo español, que incrementa un 25 % el gasto militar, no cuestiona la presencia del sionismo criminal frente a Canarias, y que en su sometimiento al imperialismo yanki quiebra unas muy importantes relaciones con Argelia. Pedro Sánchez tiene la miserable idea de que esta política internacional, entreguista y sumisa, le traerá buenas compensaciones económicas. Cree que los asesinos, agradecidos, le dejarán una parte sustanciosa del botín.