Un británico que fue declarado culpable de la captura y muerte de 2 mariposas de una especie muy preciada y protegida eludió la cárcel al ser condenado este viernes a 6 meses de prisión, pero en suspenso. Además, el tribunal de Bristol (sudoeste) condenó a Philip Cullen, de 57 años, a realizar 250 horas de trabajos sociales y a no acercarse durante cinco años a tres reservas naturales donde viven las mariposas de la especie afectada, la grande azul (Phengaris arion).