Prometía ser la mejor temporada para el fútbol femenino; la más competida, la más vista, la más seguida, la que aprovecharía el tirón generado por el Mundial de Francia en 2019. Pero la Primera Iberdrola ha finalizado de una forma inusual, dejando algunos claros pero también muchos oscuros, especialmente fuera del campo. [...] lo cierto es que lo que más ha marcado la Primera Iberdrola esta temporada han sido una serie de infortunios encadenados. Quizá porque el fútbol femenino no les importa tanto ni es tan prioritario como nos quieren vender.