Existen productos que contienen plástico, en permanente contacto con tu piel, que además de ser en algunos casos irritante, puede dificultar la transpiración. Este hecho, agravado por el uso diario de protegeslips de plástico, puede generar un microclima de calor-humedad que puede multiplicar la proliferación de bacterias, hongos, alergias e irritaciones. A lo largo de tu vida puedes llegar a utilizar más de 20.000 compresas o protegeslips, por esto, es fundamental que compruebes la composición y diseño de los productos que utilizas.