Acompañados del fotógrafo Pedro Armestre, activistas de la organización accedieron a la Finca Dehesa del Rey, en el municipio de Castilléjar, en Granada, propiedad del Grupo Fuertes, el holding empresarial propietario de El Pozo y Cefusa, y donde se crían 651.000 lechones cada año. «Lo que vimos fue abandono, suciedad y una situación realmente terrible y horrible que no esperábamos», explica Luis Ferreirim, responsable de la campaña de Agricultura de la organización ecologista. En esta entrevista, reflexiona sobre el modelo ganadero industrial.