"Campañas insensatas o inconscientes y patrioteras prenderán en la masa que no ve más allá de sus propias narices y acentuarán su desafecto a Cataluña. Entonces, los catalanes, con la sagacidad que le caracteriza, tratará de armonizar su economía con la de otros países-Francia, tal vez-y, a la primera ocasión, romperán las amarra y surgirá fatal e inevitable la disgregación".