Pocas industrias cuentan con un nivel de popularidad tan bajo como la farmacéutica. Siempre envuelta en polémicas y conspiraciones a escala mundial, es habitual observarla ligada, ya sea en prensa o en productos culturales de todo tipo, a cuestiones turbulentas, oscuras y secretistas, siempre con intereses inmorales o reprobables. ¿Pero cuánto hay de cierto en este relato? El mejor modo de descubrirlo es acudiendo a las entrañas de la industria, observando quiénes son los gigantes que, uno por uno, dominan el sector.