El cantautor Cesc Freixas denunció el uso de una canción suya por la Copa América porque es un evento clasista. Pero, ¿lo es? (CAT)

La Copa Amèrica, con su origen y desarrollo, esto es, la privatización del acceso al espacio público, la limitación en la celebración de manifestaciones de la cultura popular, el uso excesivo de la policía es un evento de clase, pero de clase alta.

[#5 Catacroc]

No es un evento clasista, lo que se innova en esas embarcaciones luego esta disponible para los yates del resto de la gente.

[#4 jjmf]

Es un deporte practicado por ricos pagado por los impuestos de todos. Pues como la fórmula 1 por ejemplo.

[#1 Estauracio]

El acceso al Race Village Oficial de la America's Cup es gratuito, y tienes emisiones de todas las regatas. La entrada media a un partido de fútbol de primera, 70€. Ahí lo dejo.

[#2 MIrahigos]

#1 Mi hijo va casi todas las tardes al parque con con los amigos a darle patadas a un balón viejo y como porterías tienen dos setos. ¿Cuánto dices que vale ya no un barco sino un amarre?

[#3 Estauracio]

#2 Pues llévalo a ver un mundial de fútbol, que te vas a dejar el sueldo de media vida, que es de lo que estamos hablando. De disfrutar con motoretas y cochericos ya hablamos otro día.

[#7 MIrahigos]

#3 ¿Pero no hablabas del "runing", no te ha convencido que has tenido que editar?

[#10 Estauracio]

#7 No era buen ejemplo, porque en realidad tu argumento era tramposo: no hablamos del precio de practicar deportes, sino de disfrutarlos como espectadores.

[#11 MIrahigos]

#10 Pero si has editado todo, en el primer comentario decías que era más clasista el fútbol porque era más caro, estás tú para hablar de tramposetes.

[#12 Estauracio]

#11 Repito que estoy refiriéndome a los espectadores, no a su práctica. No insistas.

[#6 Yoryo]

Las primeras dosis siempre gratis.... de primero de camellería

[#8 frg]

No es clasista, es súper clasista.

Eso sin contar el engaño que han utilizado para que los Barceloneses lo compren.

[#9 perej]

Es una meada de la clase alta a toda la sociedad.
Les pagamos sus carísimos jueguecitos, y encima nos chulean diciendonos que nos gustan.