Al final es un problema similar al de la libertad de expresión, todos la encontramos muy edificante (por seguir con el término) hasta que empezamos a oír burradas que no nos gustan, encajan, etc. Y ahí grosso modo hay dos opciones:
O bien se puede entender que es el debate de las ideas el que hará que unas prevalezcan sobre otras, vamos a decir en principio las más más acertadas, de manera similar a la evolución, aunque es mucho decir, o bien intervenimos en cada momento para realzar las que nos parezcan más correctas.
Ya sea con subvenciones, con un like, o con el simple consumo es inevitable que caigamos en la segunda opción en alguna medida, el problema es que por más edificante que creamos que es lo que consideremos edificante, sea lo que sea, ni es necesariamente lo que otro pueda considerar edificante, ni lo que mañana se vaya a considerar edificante y aún peor, lo que realmente sea edificante en términos objetivos.
Y con esta segunda opción, en la que incurrimos en algún grado de forma inevitable, el resultado al final es la pérdida de diversidad, algo parecido a lo que hace al por mayor el algoritmo de youtube y google:
Si de forma sistemática se ordenan las búsquedas y sugerencias por relevancia el resultado inevitable es exacerbar aún más la tendencia, de forma análoga a lo que haría un expansor procesando una señal de audio. Esa dinámica de concentración se reproduce también en el funcionamiento de la economía.
Y seguro que tenemos una idea más parecida de lo que pueda ser edificante o no que tal vez con otras personas u otras épocas, pero si perdemos la noción de que es nuestra subjetividad y pretendemos imponerla cual verdad objetiva a mi entender estamos reproduciendo errores del pasado con el signo opuesto, un poco en la línea de lo que se ha venido a llamar cultura de la cancelación.
Sobre la propaganda, lo de una mentira repetida mil veces se convierte en verdad de Goebbles yo diría que afortunadamente empieza a quedar obsoleto y te puede cambiar la vida una idea certera con la que te cruzas una sola vez, son las mentiras lo que hay que meter con embudo.
Lo de la relación con la audiencia ya sería otro capítulo odysee.com/@SoloSoundSystem:a/05-único:6
solobukowski.blogspot.com/2010/03/asi-que-quieres-ser-escritor.html
Al final es un problema similar al de la libertad de expresión, todos la encontramos muy edificante (por seguir con el término) hasta que empezamos a oír burradas que no nos gustan, encajan, etc. Y ahí grosso modo hay dos opciones:
O bien se puede entender que es el debate de las ideas el que hará que unas prevalezcan sobre otras, vamos a decir en principio las más más acertadas, de manera similar a la evolución, aunque es mucho decir, o bien intervenimos en cada momento para realzar las que nos parezcan más correctas.
Ya sea con subvenciones, con un like, o con el simple consumo es inevitable que caigamos en la segunda opción en alguna medida, el problema es que por más edificante que creamos que es lo que consideremos edificante, sea lo que sea, ni es necesariamente lo que otro pueda considerar edificante, ni lo que mañana se vaya a considerar edificante y aún peor, lo que realmente sea edificante en términos objetivos.
Y con esta segunda opción, en la que incurrimos en algún grado de forma inevitable, el resultado al final es la pérdida de diversidad, algo parecido a lo que hace al por mayor el algoritmo de youtube y google:
Si de forma sistemática se ordenan las búsquedas y sugerencias por relevancia el resultado inevitable es exacerbar aún más la tendencia, de forma análoga a lo que haría un expansor procesando una señal de audio. Esa dinámica de concentración se reproduce también en el funcionamiento de la economía.
Y seguro que tenemos una idea más parecida de lo que pueda ser edificante o no que tal vez con otras personas u otras épocas, pero si perdemos la noción de que es nuestra subjetividad y pretendemos imponerla cual verdad objetiva a mi entender estamos reproduciendo errores del pasado con el signo opuesto, un poco en la línea de lo que se ha venido a llamar cultura de la cancelación.
Sobre la propaganda, lo de una mentira repetida mil veces se convierte en verdad de Goebbles yo diría que afortunadamente empieza a quedar obsoleto y te puede cambiar la vida una idea certera con la que te cruzas una sola vez, son las mentiras lo que hay que meter con embudo.
Lo de la relación con la audiencia ya sería otro capítulo
odysee.com/@SoloSoundSystem:a/05-único:6