-Beyoncé: pollo asado jugoso muy condimentado: ajo, sal marina, pimienta negra y pimienta de cayena. Beyoncé sólo puede consumir productos Pepsi.
-Nine Inch Nails: dos cajas de maicena.
-Billy Idol: un envase de «I can’t believe it’s not Butter» (marca de margarina) y galletas con pepitas de chocolate.
-Rihanna: huevos cocidos, panceta de pavo y una salchicha de pavo, durante cualquier momento del día. Por favor, ¡estad preparados!
-Al Green: veinticuatro rosas rojas de tallo largo sin espinas.
-Britney Spears: «fish and chips» (pescado con patatas fritas), hamburguesas de queso de McDonalds sin el pan, 100 pasas e higos y una foto enmarcada de la princesa Diana.
-Busta Rhymes: veinticuatro trozos de pollo frito, condones «Rough Rider» y cerveza Guinness.
-Foo Fighters: kielbasas (salchichas polacas) enormes que concienciarían a cualquier hombre de lo que tiene.
-Frank Sinatra: una botella de cada uno: Absolute, Jack Daniel's, Chivas Regal, Courvoisier, ginebra Beefeater, vino blanco y vino tinto. Veinticuatro camarones grandes enfriados, caramelos «Life Savers» y gotas para la tos.
-Lady Gaga: un plato pequeño de queso (de una variedad inodora y poco húmeda) en hielo.
-Mariah Carey: champán «Cristal» con una pajita que se pueda doblar.
-Marilyn Manson: ositos de gominola.
-New Kids on the Block: helado Häagen-Dazs y galletas Oreo.
-Prince: kit para hacer té y café, incluyendo miel, limón, azúcar, crema y jengibre fresco. El médico debe estar acostumbrado a administrar inyecciones de vitamina B-12.
-Van Halen: arenques en crema agria, un bote grande de lubricante «K-Y» y M&M's (Aviso: no debe haber absolutamente ninguno marrón).
#8 Las cajas de huevos van normalmente en múltiplos de seis (media docena, una docena, docena y media…). El caso es que a esto le veo poco de 'trabajo de cani'. Te puedo asegurar que un porcentaje elevadísimo de los alumnos de Química de primer año no entienden de dónde sale el número de Avogadro. La mayoría sólo sabe trabajar con él a la hora de hacer cálculos (y muchas veces ni eso).
#40 Es que muchas veces la causa de algo, el porqué, no es algo cuantificable. Normalmente, me atrevería a decir, es algo que inventamos los propios humanos. Una respuesta objetiva a la pregunta "¿por qué ha habido un terremoto en tal país subdesarrollado?" podría ser "porque dos placas tectónicas han colisionado". Pero siempre habrá el listillo/filósofo/iluminado que quiera ver más allá y empiece a sacar conclusiones de cosecha propia. Y lo del terremoto es un ejemplo tonto. Podría haber puesto como motivo el origen de la vida o del universo, y seguiría siendo válido. La ciencia ofrece resultados cualitativos y cuantitativos, las opiniones las ponemos nosotros.
#36 Me meto por en medio, si no te importa. Dime, ¿cómo quieres saber el porqué de las cosas sin emplear modelos?
Los filósofos (muchos) que supuestamente se dedican a eso (entender el porqué de las cosas) suelen hacerlo sentados en su escritorio. Y no creo que sea la forma más adecuada, ni de lejos.
#35 Un espectrofotómetro no está diseñado para demostrar la existencia de nada. Ningún cacharro está construido con una pantalla que diga «los átomos existen». Me parece una catetada que, por el simple hecho de que son diminutos, haya gente que pueda negar o poner en duda su existencia con la enorme cantidad de pruebas que tenemos.
Si cierras los ojos y te ponen a una persona delante puedes tocarla, puedes olerla, puedes hasta darle un lametón en la cara. Puedes darle un pinchazo para ver si grita, puedes hacerle las perrería que se te ocurran, y puedes obtener como conclusión que la persona está ahí (aunque no la hayas visto con tus propios ojos). Y sería una conclusión sólida, si dispones de muchas pruebas.
A esa reflexión no te respondo. No creo ser el más indicado, y casi que prefiero dejar que otros se llenen la boca con palabrería filosófica sin demostrar una sola de sus palabras. A mí me gusta más dedicarme a otros asuntos.
#30 Eso es más una cuestión de definiciones que de otra cosa. También puedo afirmar que los coches no existen si defino al coche como unidad, puesto que es la suma de muchas piezas diferentes.
Por otro lado, creo que hay que matizar algo. Como dice el artículo, un orbital es una superficie que encierra un volumen en el que hay una cierta probabilidad de encontrar un electrón. Pero la representación que hacemos de los orbitales es arbitraria (normalmente los representamos como la zona en la cual hay un 90% de probabilidad de encontrar a los electrones). En la imagen se ve una zona más clara (donde es muy probable que haya electrones). Supongamos, sólo para que se entienda mejor, que esa es la zona que solemos representar (probabilidad del 90%). ¿Dice la teoría que más allá de esa zona es imposible encontrarnos con un electrón? No. Dice que a medida que nos alejamos es menos probable. Por eso más allá de la zona clara hay una zona más oscura (menos probabilidad, menos electrones saltan a la pantalla detectora). Y más allá de esa zona, oscuridad (es muy improbable encontrar electrones, y por ende es improbable que salte alguno a la pantalla detectora). Una representación más adecuada sería la siguiente (cuadro del centro): upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/c/cf/HAtomOrbitals.png
Ahí se ve claramente que los electrones pueden estar en cualquier parte, a pesar de que es más fácil encontrarlos en las zonas más claras. Por lo que de momento, sí, la teoría se sostiene bien.
#27 «La teoría de cuerdas es un modelo fundamental de física teórica que básicamente asume que las partículas materiales aparentemente puntuales son en realidad "estados vibracionales" de un objeto extendido más básico llamado "cuerda" o "filamento"»
No es la Ley de cuerdas, es una Teoría. Ademas, estás asumiendo que para que algo exista tiene que ser sólido, 'material', que se pueda tocar. ¿Qué te hace suponer que algo no existe por el hecho de que esté (supuestamente) conformado por muchas vibraciones?
En fin, si tan seguro estás puedes escribir un paper y que lo lea la gente, con tus pruebas y argumentos. Lo que se iban a reír.
#25 No digas tonterías. La ciencia no es como la religión en ningún sentido. ¿Quieres comprobar por ti mismo si existen los átomos? Perfecto. Estudia química, accede a un laboratorio y realiza las pruebas que creas necesarias. Los resultados que obtengas serán concluyentes: hay algo que encaja bien con las teorías que has aprendido (y que puedes cuestionas lo que quieras, siempre que tengas pruebas). Algo que puedes manipular a tu gusto y ver si se comporta como debería.
Luego hazte cura. Asciende. Hazte Papa. Seguirás sin saber si dios (el tuyo) existe o no.
Para entender acerca de esto no hay ningún obstáculo, ninguna barrera que te impida estudiar (o que te lo impidiese hace veinte años, más allá de los motivos económicos que te dificulten acceder una educación reglada). Dios, sin embargo, es otro asunto.
#18 La mayoría de los filósofos que conozco (los que "no quieren quedarse en una fórmula" y pretenden entender el mundo y tal) son precisamente los que menos idea tienen de estos asuntos. Discuten sobre cosas que, o bien no pueden o saben demostrar, o bien sólo son relevantes para los propios filósofos. Me parece que los que más interesados están en este asunto son los científicos. Y no, no se quedan "en una fórmula".
#15 La verdad, me parece que más que llevarlos a un laboratorio a ver cacharros cuyo funcionamiento no entienden ('mira, aquí tienes un espectrofotómetro VIS-UV') es preferible darles explicaciones, mostrarles qué proceso hemos seguido para averiguar lo que ya sabemos.
#7 Estoy de acuerdo. Lo importante no es si existen unos entes diminutos que encajen al 100% con nuestra teoría, sino si nuestra teoría es lo suficientemente sólida como para hacer predicciones útiles. Lo único que tenemos claro ahora es que la actual teoría parece encajar bien con las observaciones. También (me) parece bastante claro que debe haber algo tras eso que llamamos átomos, aunque no tiene por qué corresponderse totalmente con la concepción que tenemos de ellos. Siguen surgiendo datos, siguen cambiando las teorías.
Es sólo una opinión personal, pero creo que sólo la relevancia de Jesucristo (para bien o para mal) estos últimos 2000 años basta para eclipsar totalmente a Aristóteles y Platón.