En primer lugar, ¿qué es?. Un brote psicótico es lo que sucede cuando tu mente no sabe de qué trata la realidad, y empieza a construir explicaciones con lo primero que encuentra. Eso son los delirios, que son la parte más espectacular de la psicosis: Imagínate que pierdes pie sobre la realidad a tal punto que cuestionas incluso si estás vivo o muerto, que cuestionas en general todo lo que tu mente cree saber sobre la realidad.
El proceso en el que la mente afectada por terror cognitivo acerca de la realidad empieza a fabricar explicaciones, eso es la psicosis. Y en ese sentido sí, tiene sentido que a alguien de mentalidad rígida o con un uso desmedido de alteradores de la percepción, pueda producírsele ese efecto de terror cognitivo, precisamente por cuestionar "demasiado" (o demasiado rápido) los condicionamientos y construcciones cognitivas abstractas con los que fabrica su realidad.
Ahora bien, y aquí es lo importante: El estado "normal" en el que nos encontramos es también una suerte de delirio (no lo digo yo, lo dice Jacques Lacan, el psicoanalista más importante que ha existido después de Freud), es una fantasía acerca de lo que es nuestra vida y nuestra realidad. La diferencia entre nuestras fantasías y la "psicosis", es tan sólo que la fantasía consensuada nos permite operar en el mundo de una manera que los demás aceptan (porque compartimos cierta cantidad de rasgos en nuestra fantasía), y que se trata de un modo más o menos correcto de operar con la realidad (aunque obviamente tiene sus fallos. No cuestionarse p.ej que en el PPSOE tengan la solución a algo es una fantasía peligrosa a estas alturas. Seguir los convencionalismos y lo que se supone que tienes que hacer puede sumirte fácilmente en una constante depresión).
Un enteógeno te hace cuestionar tu realidad a todos los niveles, y ahí se encuentra su poder. En exceso (y siempre hay a quien se le va la mano) puede hacer que pierdas… » ver todo el comentario
En primer lugar, ¿qué es?. Un brote psicótico es lo que sucede cuando tu mente no sabe de qué trata la realidad, y empieza a construir explicaciones con lo primero que encuentra. Eso son los delirios, que son la parte más espectacular de la psicosis: Imagínate que pierdes pie sobre la realidad a tal punto que cuestionas incluso si estás vivo o muerto, que cuestionas en general todo lo que tu mente cree saber sobre la realidad.
El proceso en el que la mente afectada por terror cognitivo acerca de la realidad empieza a fabricar explicaciones, eso es la psicosis. Y en ese sentido sí, tiene sentido que a alguien de mentalidad rígida o con un uso desmedido de alteradores de la percepción, pueda producírsele ese efecto de terror cognitivo, precisamente por cuestionar "demasiado" (o demasiado rápido) los condicionamientos y construcciones cognitivas abstractas con los que fabrica su realidad.
Ahora bien, y aquí es lo importante: El estado "normal" en el que nos encontramos es también una suerte de delirio (no lo digo yo, lo dice Jacques Lacan, el psicoanalista más importante que ha existido después de Freud), es una fantasía acerca de lo que es nuestra vida y nuestra realidad. La diferencia entre nuestras fantasías y la "psicosis", es tan sólo que la fantasía consensuada nos permite operar en el mundo de una manera que los demás aceptan (porque compartimos cierta cantidad de rasgos en nuestra fantasía), y que se trata de un modo más o menos correcto de operar con la realidad (aunque obviamente tiene sus fallos. No cuestionarse p.ej que en el PPSOE tengan la solución a algo es una fantasía peligrosa a estas alturas. Seguir los convencionalismos y lo que se supone que tienes que hacer puede sumirte fácilmente en una constante depresión).
Un enteógeno te hace cuestionar tu realidad a todos los niveles, y ahí se encuentra su poder. En exceso (y siempre hay a quien se le va la mano) puede hacer que pierdas…