Me pagué la carrera haciendo caricaturas en la calle. Le debo mucho a este oficio. Es un arte realmente muuuy complicado, no hay recetas y la magia no siempre es fácil de lograr. Mil respetos a los caricaturistas.
Yo tampoco estaba allí, pero las versiones que corren aquí por Salamanca son algo diferentes de la óptica que se ha tomado en los medios. La víctima nunca es culpable, pero (por lo que se dice) no fue tanto una pelea como una paliza a la pareja, y que el atropello fue al momento de escaparse en el coche....
Repito que tampoco estuve allí...