Aquí otro desarrollador que en su tiempo libre se curro un jueguillo para Android con el que aprendí bastante cosas:
1. Adapta el control al público de la plataforma.
Mi primer gran fallo fue poner un sticks y 2 botones táctiles en la pantalla simulando el mando clásico de una consola de videojuegos clásica.
Esto, a priori, se puede ver en muchos juegos de exito, el problema es que la jugabilidad del mio exigía movimientos rápidos y cierta precisión con los controles, por lo que se hacía díficil de controlar incluso para jugadores experimentados (en parte debido a que con la táctil, a diferencia de unos botones físicos, no tienes un verdadero feedback de lo que pulsas).
Para mi el control estaba bien, pero claro, yo tenía que estar probandolo constantemente durante su desarrollo, por lo que ya le tenía el callo muy cogido al juego y no me enteraba de que el juego iba a ser tan díficil de controlar para la gente.
A todo eso también hay que sumar que gran parte del público para móvil es "casual" y la gran mayoría de ellos no se ha manejado nunca bien con un pad/joystick de los de toda la vida. Así que menos lo ibán a hacer con uno táctil que hasta a los hardcore-gamers les costaba.
Piensa que estás ante un control táctil, y que a la mayoría del público para móvil por instinto lo primero que hacen es apretar con el dedo en un punto o arrastrar el dedo por la pantalla. Usa esos gestos para hacer el control de tu juego.
2. Entra por el ojo.
He visto autenticas basuras jugables que ahí están simplemente por tener unos gráficos de infarto. En el mundo de los videojuegos las apariencias importan, y mucho. Mi gran fallo en esta ocasión fué que me curré todo, incluido los gráficos cuando no sé dibujar
Al final, pues así quedó el asunto: gráficos muy simples y muy amateurs. Al menos le intenté dar cierto encanto al conjunto y a la gente le resulto gracioso.
El problema consistía en que me metí en una aventura de tener que dibujar… » ver todo el comentario
A mi lo que mas me ha agobiado es la pobre hormiga intentando desenredarse. Me ha venido a la cabeza la sensación esa de cuando se te mete un trozo de carne entre las muelas, que te molesta un montón pero como estas en público debes sacarlo usando la lengua. ¡Puedes estar horas y horas y no conseguirlo nunca!
#4 Me tocó ser presidente de mesa hace poco y durante unas votaciones la máxima autoridad es el presidente de la mesa. El lehendakari en ese momento no es más que un simple votante y los representantes de cada partido no pueden hacer absolutamente nada.
Incluso el presidente tiene a sus ordenes a la policía y puede ordenar que eche a la calle a quien crea necesario.
En las reglas también pone bien claro que cualquier insignia o emblema político estará prohibido y que será responsabilidad del presidente de mesa que no se muestre ni se haga política durante las votaciones.
Por supuesto, ser presidente le puede tocar a cualquiera y cuando llegas estás completamente descolocado (con suerte algún representante de algún partido te puede echar una mano) por lo que en una situación así no sabes como reaccionar, se te viene todo grande por lo que es normal que en ese video el presidente no sepa como reaccionar.
Pero con la ley en la mano lo suyo hubiese sido echar a toda la gente a la calle, periodistas incluidos, y nos hubiesemos quedado en la sala el votante, los vocales y yo. Pero claro, es fácil decirlo y hay que echarle muchas agallas al asunto, porque ante lo inusual del momento más de uno se hubiese puesto tonto (incluido periodistas a los que les jodes la foto) y hubiese hecho falta paralizar las votaciones y llamar a la Ertzaina.
No quería hacer SPAM y el ciclo de vida del juego lo doy por finalizado, pero por si teneís curiosidad buscad por: Pamuchi