#1#2 Miles de ancianos muertos y ustedes hablando de una página web. Hay que tomar más vitaminas, la deficiencia de B12 produce alteraciones mentales que pueden ser muy perniciosas.
#18 Yo estoy en contra de prohibir la biblia, pero porque siempre preferiré a un ateo que la leyó y la comprendió que a un "creyente" que no la abrió ni como abanico...
#13 Si crees que PSOE o Sumar son de izquierdas o algo así es que no andas muy al día.
Por otro lado Durruti puso a los gitanos a trabajar y los fascistas le pusieron una bala en el pecho...
Pareciera que a alguien le viene bien que haya una delincuencia de baja intensidad a la que señalar para que nadie mire a la delincuencia de alta intensidad.
#1#4 La duda es absurda y olvida o desconoce la historia.
Los nazis toleraron sin grandes problemas la homosexualidad... con tal de conseguir el poder. Y hasta que lo obtuvieron.
La historia de Ernst Röhm es.wikipedia.org/wiki/Ernst_Röhm y la noche de los cuchillos largos es.wikipedia.org/wiki/Noche_de_los_cuchillos_largos (que no son lecciones de historia menor) demuestran cómo el fascismo está dispuesto a integrar partes sociales, a priori "indeseables" para ellos, con tal de engañar a la sociedad en su ascenso al poder.
Pero siempre se puede pensar que el tal pugilato es un padre preocupado y que los problemas son de los demás. Hasta que los problemas se comen a un@ mism@.
#61 No me defraudas a mi, si no al padre celestial, usando en vano el nombre de su hijo, que dio su vida por todos. El problema no es pecar, todos vivimos en el pecado. El camino cristiano es, precisamente, cómo enfrentar la vida entre pecado y pecado.
"El hombre bueno, del tesoro del corazón saca lo bueno, y el malo, saca lo malo. Porque de lo que rebosa el corazón habla la boca." Lucas 6,45
No busques el paraíso futuro en otra vida o en la virtud del golpe de pecho. El paraíso es ahora y es aquí.
“El reino de Dios no vendrá con advertencia, ni dirán: Helo aquí, o helo allí; porque el reino de Dios está entre vosotros” Lucas 17,20
Los peores fascistas son los que se disfrazan para no parecerlo... y los únicos peores que esos, los que ni siquiera tienen el valor de serlo e incitan a otros para que lo sean por ellos.
Llevas un pecado como nombre (mentar a Dios en vano). Lo que a la vez te convierte en un mentiroso (si mientes, no eres seguidor de Cristo).
Y para colmo, mezclas las religión con la política, porque "Al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios” (Mateo 22, 21)
#6 Esa "gente" que decía que la ley sólo sí es sí ponía en la calle a violadores, aplaudiendo que la ley haga impune a los acosadores.
No veo que te importe la ley ni la democracia, creo que aplaudes el revanchismo de una manera infantil y peligrosa,
#1 Tus afirmaciones son infundadas y solo fomentan prejuicios. Si tu opinión se basa en una preocupación legítima, real y personal puedo entender tu posición, pero no puedo compartir tus conclusiones. Todos los datos arrojan lo mismo: no hay una correlación de peso entre inmigración y delincuencia; de hecho, muchos estudios muestran que los inmigrantes tienen tasas de criminalidad similares o menores a las de la población nativa.
La delincuencia urbana es un problema complejo con múltiples causas socioeconómicas, y simplificarlo a la presencia de inmigrantes es engañoso. En mi entorno rural yo tengo un un centro de menores extranjeros a menos de 10 metros de mi puerta y llevamos así más de 20 años sin problemas. De hecho los educadores promueven que los jóvenes del centro se integren en la vida del barrio, por ejemplo ayudando y/o acompañando a las personas mayores sin familia. Mientras, la delincuencia local sigue sin abordarse: mi vecino de abajo, que puede permitirse el alquiler porque vende droga (con el problema que eso supone para el barrio), lleva tres años maltratando a sus sucesivas parejas a la vista de todos y sin que nadie haga nada por detenerlo. Mi hijo, con una ingeniería, sigue viviendo en casa porque no puede permitirse un alquiler.
La percepción de inseguridad se amplifica por sesgos y una cobertura mediática manipuladora. La realidad es que muchos inmigrantes contribuyen positivamente a nuestra sociedad, trabajando arduamente y enriqueciendo nuestra diversidad cultural.
En España, sin inmigrantes ya casi no habría pastores, ni quien recoja las cosechas, etc. Creer que una sociedad de 45 millones de personas puede sobrevivir a base de turismo de baja calidad, explotación laboral y burbuja inmobiliaria es insostenible.
En lugar de perpetuar estereotipos negativos que solo fomentan división y odio, necesitamos políticas inclusivas que promuevan la integración social y económica de los inmigrantes, así como la promoción de la cultura y el pensamiento científico entre los nativos.
Y sobre todo más y mejor justicia y fuerzas de seguridad, porque estas que tenemos son un chiste de mal gusto.